Recomiendo esta exposición, por su doble juego, detrás de la inocente apariencia de los dibulitos se esconde una auténtica cocina de interior, ni el Bulli ni na, ahora lo que se lleva es comerse a si mismo.
La obra expuesta es de Rosalia Banet y lleva el titulo de Carniceria Love, estrá hasta el 5 de abril en la Galeria Espacio Minimo de Madrid.
Estos dos ultimos post están siendo a su manera muy viscerales, creo que las clases de inglés metafísico que estamos dando unido a los 8 días fantásticos de la carne argentina me estan llevando a mi lado más entrañable*
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